sábado, 31 de enero de 2015

El halcón de Eleonora

Cuando el invierno más intenso llegó
los pájaros
las hojas de los árboles movidas por el viento
el beso áureo en los labios de Antonia
el puñal certero penetrando la piel
el rostro terso apoyado en la ventana
todo
todo se congeló
Sobre las nubes sin embargo
un halcón de Eleonora
siguió la ruta del sol
en un vuelo constante
orbital
jamás abandonado
aunque lo siguiera la noche
y sus plumas traseras bordearan los gélidos límites del aire

El halcón intuyó 
con su corazón agudo 
el bramido del iceberg sobre el viento susurrado en su vuelo

Bajó en picada
como emisario del ciclo a fecundar estaciones
decidido a quebrar el hielo que detuvo el curso de la sangre

Su gañido solar se expandió como un eco
deslizando la curvatura del pulso
hasta la fractura del frío como quien pisa millares de espejos al mismo tiempo

La flora humana lentamente recobró el movimiento
la comunión de sus halos despertó a las hojas
las hojas al trino
el trino al beso de Antonia

Sobre el medio de la ciudad yace el halcón tendido muerto
Sus alas escarchadas reflejan el brillo del sol sobre los rostros de la gente 

La huella de la nieve se avalancha en el recuerdo
se derrite en la memoria 
avanza al corazón 
agita la campana luminosa
la gente abre sus ojos y ve como arriba de ellos
cae una pluma del cielo
iluminada por el sol que escapa por el agujero
que dejó el halcón al atravesar las nubes 












miércoles, 28 de enero de 2015

Hilos

Dos agujas cruzan universos
como semillas de cometas 

Ambas en opuestas direcciones
destinan sus puntas al encuentro

El hilo de la aguja derecha
vibra por la melodía de una canción de cuna

El de la aguja izquierda por el llanto
del niño abandonado

Los filos atraviesan la piel del cosmos

El beso de la espina es inminente 

En el momento del tacto
se fecundan cada una atravesada 
como quien las dejase caer rectas sobre un mar sigiloso

Se contienen así mismas 
sin lágrimas de mercurio

Se separan

Una aparece en el estuche de los hilos
Otra sobre los pliegues de la cama

El niño acunado encuentra el estuche
toma el hilo blanco y lo tiñe de rojo

El niño abandonado se pincha la piel
congela la ausencia y despierta del llanto

Cuando hubo silencio
la sangre volvió a su sitio 
las agujas así mismas
el tacto a sus puntas
el viaje a su centro
el centro a la tela de una camisa remendada
quebradiza por el sol 
enterrada en el desierto
















Otro frío


La gota de aceite cae
sobre el pavimento hervido de verano

La calle cruje como barro seco

Un abanico cambia el curso de la dirección del sudor 
destinado al cuello

Los obreros taladran la calle
como elefantes buscando agua

Las moscas reinan el aire

Todo se derrite y se mezcla 
en un sólo punto

Sólo el miedo congela a la gente 




La mujer de sal

Del crepúsculo nace la flor cobriza
derramando pétalos como barcas

Ellas navegan en círculos
con la dirección de la proa en el centro

El pétalo más cercano al polen se hunde

Su piel más gruesa es la sábana 
de tu cuerpo escondido

Mujer germinada por el sol
abres los ojos mientras las barcas se alejan

Los peces te cruzan siguiendo las burbujas 
que escapan de tus labios

Tu respiro es reemplazado por el parpadeo

Se vuelve oscuro
muy oscuro

Cerca de tu cuerpo pasa un tritón que toma tu mano
y la suelta

Tocas el fondo musgoso
de la arena como un barro 
a tu espalda como el cielo

Respiras

Inhalas todo el mar 
los seres 
los barcos
las botellas de los mensajeros 

Blanca de sal flotas sobre la tierra
lloras toda el agua
y en el reflejo del océano te reconoces 
bella luna... 








martes, 27 de enero de 2015

La mujer de la primera fila


El viento no ha dominado su corriente habitual
en tu piel

Tus mareas están quietas
como la mirada del pescador puesta sobre el horizonte

Qué ocurre en ti
que pareces dormida en el sueño del hielo

Te has puesto los segundos en la boca
para masticar a voluntad el tiempo

El tallo creció a medias
en el degradado de tus ojos como el otoño

Me pregunto cómo existes
apoyada entre el respiro y la asfixia

Si eres real voltea tu cabeza y mírame
Si eres irreal voltea tu cabeza y mírame

Tengo los ojos puestos en el día de mi muerte
y en el reverso mi llanto
mi primer llanto
para que creas que soy real
y voltees tu cabeza para verme 

viernes, 23 de enero de 2015

Para escuchar otras risas

Los zapatos calzan bien esta tarde
sus suelas tienen murmullos de costa

Se siente cálido andar con la sensación de un niño
que lleva entre en sus manos una varita de madera
arrastrándola por los muros

Recuerdo el sol interrumpido por la cerca de la estación del tren 
cuando regresaba a casa en bicicleta y los rayos en mi cara
como un proyector de viejas películas 
me daban luz y sombra en un día caluroso 

Una paloma vuela frente a mí
y puedo ver como el viento le estremece las plumas al aterrizar sobre el parque

Las personas me cruzan y yo las cruzo a ellas
evitando el contacto y el tacto visual

Levanto mi cabeza cuando doy cuenta de ello 

Si el rostro fuese una historia 
tanto se contaría en las calles y en efecto
tanto se dice en silencios
en las cabezas cabizbajas y otras arriba mirando a las palomas

Tengo encendida la risa de mi infancia y sus ecos
resuenan en el dorso de mi boca
que anhela reír porque sí
para romper el silencio
para escuchar otras risas

Quisiera que a todos le calzaran bien sus zapatos esta tarde
para que mañana 
descalzos 
pudiésemos sentarnos en la orilla de la costa 
a mirar como cae el sol
y a sentir como nace una nueva vida
para ti










viernes, 16 de enero de 2015

Luciérnagazz

La tarde se divide
se multiplica
se hace el amor así misma

Revienta un huevo fecundado por la guitarra

Dos estrellas chocan de espalda
pero la noche es más gruesa
El barro espeso de la música ronca
y el sueño muestra sus senos tejidos a mano

Donde quiera que vaya un niño me mira a los ojos

y desde entonces ando por la calle con el corazón desnudo
porque así me los enseñó el silencio
y a veces el baile de una mujer envuelta en humo
formas desconocidas revoloteando al tiempo
o una mano en la nalga izquierda
juntos en el farol creativo de la luciérnaga loca
iluminándolo todo
todo a su alrededor

miércoles, 14 de enero de 2015

¿Cuál de aquellos hablas tú?

Aunque el tiempo no exista
como creemos que existe
supongo necesaria 
- a modo de aprendizaje -
su fragmentación  

Si el recuerdo no dijese ayer

ya no sería un recuerdo
por lo tanto
un continuo presente existiría - existe - 

La plenitud del momento absorto de sí mismo

desplegaría el matiz verdadero de las cosas 

La unificación instantánea 

la boca del pez y el beso 
atravesadas bajo la misma espada
haría de nosotros la curva rasa del instante 

Ya no podría avergonzarme de mis desdichas 

de aquella vez que falté a la verdad 
y la verdad me faltó a mí por no decir te quiero lo siento gracias 

En efecto mis palabras 

separadas por los espacios entre palabras
se entregarían al presente 
dando poesía en vez de sacristía 
a los libros que conjugan el miedo en portadas de amor

Entonces ¿por qué el ayer el ahora y el mañana?


Creo en el pasado como experiencia 

La roca volverá al camino si viajamos por el mismo sendero 
El ayer no tiene un porqué sino un saber
saber digerir la separación como un trago de ilusión
directo al presente 
sano de ataduras
puro por instinto
que a paso claro figura su simpleza como ahora; segundos ensanchados 
hasta encontrarse en un punto
punto como un globo un planeta un sistema 
y a la vuelta de la rueda qué nos queda más que ahora
si el presente queda en coma el futuro se detiene  

Todo simbolismo del tiempo habla su propio idioma 

Ayer para aprender
                                Mañana para creer
                                                                Ahora para crear


¿Cuál de aquellos hablas tú? 








martes, 13 de enero de 2015

El ser que me contiene

Vivo donde nace la voz rodeada de nieve
sagrada de silencio intermitente
oscura como la luz del corazón

El ser que me contiene abre su boca y canta

Sus ondas de viento y albor
fundidas en millares de amaneceres
se agolpan detrás de una puerta
y en el reflejo de mis ojos la explosión

Yo tiemblo de huesos cuando el fulgor
aun más grande que la avalancha
sube como un flujo de cristal algodonado
y arriba al cielo azulado le cruza un gorrión

El sonido nace en el precipicio
los húmedos gigantes aletean
sus cuerpos aferrados de caverna
dan matices al color

Como caricias de párpado en el alma
cierro los ojos de libertad
El ser que me contiene deja la rama 
el águila aprende a volar

lunes, 12 de enero de 2015

Sólo nos vimos

Qué caminos voy andando
que a paso lento me detengo 
porque esta vez no ha sido el viento
el que dibuja una sonrisa en mi rostro

Qué ocurrió en el trayecto

de tu vida y la mía
que ahora detenida te encuentro
entre tanta gente dormida

Se suponía que eras sueño

la canción que se queda encendida
en el cuarto de mi centro
donde bailo contigo y todo brilla

Pero te has manifestado

La flor es bella sin el juicio
y aunque de ti sin permiso
vaya abarcando tus caderas

Trazo a trazo voy armando

la solución del infinito
porque tu boca es el comienzo
de aquella vida sin principio

Es silencio o es el canto

el suceder de estas líneas
porque al final sólo nos vimos
sin evitar la partida