miércoles, 13 de marzo de 2019

Un caballero con la mano en el bolsillo vertical

Siendo suficientemente certero
pudiese apostar mi nombre 
mi camisa y mis calzoncillos modelo 1964

Siendo claro
esto no responde a ninguna insinuación sexual

En efecto
el hecho de apostar concretos e intangibles 
es resultado de confianza

Hasta acá pura manfinfla retórica 
pero es que cuesta, querido lector
darle punta y filo al diamante

Bueno ya...
aclaro antes que lo de los calzoncillos es real
Ya se acuerda usted de esos con bolsillos verticales?
Todavía los venden

Bueno ya... ahora sí
siendo suficiente sincero 
no sé cómo empezar el poema
pero algo tiene que ver con voluntad
ímpetu y amor

Soy cuidadoso con los nombres
¿quieres aparecer tú?
¿también tú?
No se molesten...
De pronto
si no se atrapa un poema 
uno queda desollado de sueño, pendiente y matiz
entonces ese poema es suspiro, trueno en tormenta,
gotita en el agua
y uno como un idiota -cada cual como puede-
queriendo atrapar el viento con las manos
se pasa la tarde en la ventana esperando

No hay comentarios: