A juzgar por su voz
en sus cuerdas vocales trazadas con pétalos
hay una tarde que no atardece
y un silencio que no calla
Si dices hola las olas me hablan
Una copa de vino se derrama en la luna
y como un pañuelo de seda roja
tus sonidos me tapan los ojos
para que te vea siempre
como una primera vez
en tus palabras
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