Visité un río seco
de esos de rocas en vez de peces
Llegué por el camino del viento
y el eco de los camiones
La arena se desnuda cada vez que avanzo
Yo le correspondo como un caballero y me tapo los ojos
Me acompaña una plantita cuyo nombre
no pienso averiguarlo
prefiero llamarla amiga por decirme
esa maravilla de silencio
Aun sin el agua las piedras siguen cantando
Qué valentía la del mosquito de visitar al río
después de tanto tiempo
Todas las ramas del árbol apuntan al cielo
A pesar de la sequía esperan la lluvia
Me emociona ver que la sed no es espina
ni desaliento
Sopla el viento...
Hay un engranaje cósmico en todas las cosas
Si el río está seco
arriba en el cielo azul
abundan peces sobre un coral de nubes
El agua nunca perdió su curso, supongo
sólo avanzo sin detenerse antes de convertirse en polvo
Tal vez algo de ese río habite en mí
quizá la humedad de mi sudor que cae en las hojas
luego a la arena
convirtiéndose en río
un pequeño río otra vez
1 comentario:
Y es que el mundo sigue girando pase lo que pase... nada se detiene; en ocasiones, por suerte y en otras, por desgracia.
Me gusta aquello de que las piedras sigan cantando... tiene una melancolía especial...
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