miércoles, 29 de enero de 2025

Una palabra a la velocidad de la luz,
quizás este infinito nos contenga,
decirlo fugaz 
sobre el eje de la misma tierra
para que alcance a las palabras que secundamos

Un millar de palabras veloces e invisibles
sin azar
pensadas por el hablante que dice:
pájaro
cometa
volantín

Pero también otras palabras vendrán
y se dirá:
desierto, azul y sendero

Todo lo que se diga cruzará el cielo
y el hablante dirá lo necesario para
que las cosas más extraordinarias vuelen

En la tierra voladora de los barcos voladores
brotarán nuevas palabras y ni el hablante
ni el lector podrán pronunciarlas nunca

Unas cuantas letras quedarán
aguardando como un aro perdido 

Las consonantes de los campos y los desagües
celebrarán un concilio del sonido de sus sueños 

Y atraídas por una fuerza magnética 
reunirán sus partes
en una carta esperada toda la vida
y el hablante recitará un último verso
antes que el cielo se abra
y todas las palabras del mundo se hayan escapado 


sábado, 18 de enero de 2025

Mira el amanecer que crece
en esta parte de la noche

¿Es allá o es acá samurai?

¿Dónde realmente nace el sol?

Estamos tú y yo 
suspendidos en una burbuja

Cuando miras el sol yo te miro
cuando miro el sol tú me miras

Desde arriba también podemos ver
el jardín secreto de la noche
donde las plantas, el río y las flores
guardan siempre la luz de la luna

Todo es breve e inmenso samurai
las mariposas plateadas
se escapan del jardín secreto de la noche
y cubren el manto negro de todos los cielos

Se acordarán de nosotros samurai
o somos la memoria contenida
en esta burbuja que viaja al sol

¿Te acordarás de mí 
cuando despertemos de este sueño
y la gran luz cubra de blanco nuestros rostros?

martes, 7 de enero de 2025

Al parecer has puesto tus manos en el libro, sospecho.
Las circunstancias 
los pájaros y las circunstancias
las plumas y las circunstancias
son mi argumento.

¿Sabes que puse un animal sensorial en cada página?
que en el tejido invisible que nos sostiene 
los hilos se mueven hacia un mismo centro
como la telaraña que teje el corazón
con sus hebras doradas y azules destellos.

Pero no es una trampa 
es un anuncio sin voz 
sin cuerpo
ni palabra.

Es la mañana que perciben los abandonados
cuando ya no están más solos.

Es el silencio que precede después
de las campanillas de la puerta.

El súbito vuelo de los pájaros.
El prisma.
El brevísimo aroma.

Ondas expansivas que rodean
la silueta de un rostro
que gira su cabeza
para verte.