piedra a piedra
la cordillera de la costa
Imperceptible a los ojos
cual un árbol
también parpadea
El viento siempre sopla desde el mar
Un pescador olvidó respirar el perfume de una sirena
y ella me canta en aromas del otro lado del puente
Una patria partida
al amor siempre concéntrico
me llama
Qué es un país sino una idea frágil - tan frágil -
Prendo una fogata
Vengo desde esa ciudad que miro desde arriba
Soy también el musitar de la urbe
El grito del niño que corre descalzo
La sábana que flamea en el patio de tierra
La voz amordazada de lo que se dice con los ojos
Algo se apoya en mí
Siento sus hilos rozándome los huesos
La sombra de un pájaro me toma el alma
dejándola caer en un vacío similar al silencio
Es el viento...
Tantas veces atardeció cuando no estuve
Tantas veces atardecerá cuando no esté
Pero la ciudad y mi cuerpo es pasajero
veremos otro sol
lo siento en el mío
que se asoma
se asoma...
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