miércoles, 20 de noviembre de 2019

Fórmula apelable de romance invertebrado

Más inocente aunque el agua también
sobre su corriente cascada abajo en la columna 
tus ojos sostenidos díganme por qué
si temblando repito su rasguño divino que parte el pecho
y me siembra canciones de mar
Es que... qué voy a decir 
si se ensancha la fuerza que fabrica el latido 
que impoluto o herido me abraza igual
Por tanto el amor tiene su propia ruta
y el agua que señala ese dedo que la revuelve
como una pócima inyectada en el aire
secretamente espesa
me lanza al pasto del espalda con los brazos abiertos
cayendo en todos los cielos de todas las direcciones 

Tengo un corazón enlazado 
en el filo de una esfera que nace

Una bandada de susurros 
liberados en las calles 

El aliento de un gorrión
que contorna a los fantasmas

Un pedacito de ti en mí
no más

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